La necesidad de cambiar la política de transportes de manera urgente, incorporando modalidades sostenibles y eficaces que ofrezcan a la ciudadanía alternativas al automóvil, constituye el eje de la jornada Movilidad y planificación urbana: un reto a plantear, celebrada recientemente en la Diputación de Granada y en la que se ha puesto de manifiesto que “el modelo actual, en términos ambientales, energéticos y sociales es insostenible” según adelantó el vicepresidente segundo de la Diputación, Julio Bernardo, durante la inauguración del encuentro.
En esta misma línea, José Luis Cañavate, experto en urbanismo y movilidad, señaló que “al ritmo actual de crecimiento del transporte privado frente al público, en diez años la capital necesitará una extensión equivalente a 80 campos de fútbol para poder aparcar los vehículos” y cuantificó en 12.000 los coches que actualmente buscan estacionamientos en el borde la ciudad. Para Cañavate, en este momento, tres de cada cuatro trabajadores en el área metropolitana trabajan fuera de su municipio, lo que supone unos 300.000 viajes diarios hacia la ciudad desde los municipios del cinturón.
Esta situación demanda un Pacto para la Movilidad “plural en el que deben comprometerse los ayuntamientos, las consejerías competentes, los organismos y consorcios específicos, las asociaciones profesionales y ciudadanas y la sociedad civil en su conjunto para mejorar la calidad de vida de todos”, explicó Julio Bernardo. Este pacto, según el vicepresidente, además de promover el uso de la bicicleta y fomentar la utilización del transporte público, “deberá garantizar una distribución de mercancías ágil y ordenada y compatibilizar la oferta de aparcamiento con la demanda de rotación y de residentes”, entre otras propuestas.
Sobre el uso de la bicicleta, José Luis Cañavate apuntó como alternativa la utilización de los viales que unían entre sí los municipios del área metropolitana y a éstos con la capital, como carriles para bicicletas y peatones “lo que conlleva una inversión ridícula para adecuación de estas infraestructuras frente a los presupuestos que se manejan para un kilómetro de autovía”. Cañavate afirmó que llama la atención el aumento de la movilidad en coche que ha crecido mucho en los últimos veinte años, frente a la disminución de la movilidad no motorizada lo que constata que “hay ciudadanos que ya no andan nada y para los que distancias de un kilómetro aparecen inalcanzables”.
La ciudad de Granada y su área metropolitana tienen 500.000 habitantes y un conjunto que abarca muchos municipios pero tiene un funcionamiento único, con un solo mercado de trabajo, un solo mercado de vivienda y unas necesidades de ocio y recreo que no pueden ser resueltas desde los municipios pero tampoco sin ellos.