Una vez se aprueben los presupuestos generales del Estado y con ellos, las ayudas de 81 millones de euros que el Ministerio de Industria ha asignado para la adquisición de vehículos eléctricos, el Gobierno sacará un Real Decreto, a mediados o finales de enero de 2011, que las regule, y a concurso público la selección de una entidad colaboradora que las gestione, “de tal modo que hacia finales de febrero o principios de marzo de 2011, tendríamos disponible regulación y puesta en marcha de estas ayudas”, ha señalado el director general de Industria, Jesús Candil, durante su intervención en el foro “Coche Eléctrico. Realidades y Perspectivas”, que Gestiona Forum ha organizado en Madrid este 19 de octubre, dentro de su ciclo de automoción.
El encuentro entre política y empresa que Gestiona Forum ha organizado en torno al coche eléctrico en el hotel Wellington de la capital española ha sido, sencillamente, acertado y muy oportuno, y no es fácil por ello resumir la cantidad de titulares que se han podido extraer de las diversas intervenciones.
Así pues, al hilo de las ponencias de los invitados y de las preguntas de los asistentes han salido a relucir las debilidades, amenazas, fortalezas y oportunidades de un mercado que se muestra efervescente y que se debate entre las enormes posibilidades de negocio que surgen en su estela y la incertidumbre de hacia dónde, y sobre todo de qué manera, se van a desarrollar estas oportunidades y cómo aprovecharlas.
El foro se ha dividido en dos apartados. El primero, titulado “Impulso Institucional y Proyecto Industrial”, ha tratado de exponer los puntos de encuentro entre la Administración central y el tejido industrial para el apoyo a la promoción del vehículo eléctrico como alternativa real de movilidad y ha evidenciado la oportunidad que representa a nivel industrial, tanto para las propias marcas como para el sector de componentes y módulos, la industria electrónica y las tecnologías de comunicación.
La segunda parte, titulada “Ayudas, Ecología e Implantación Operativa”, ha contado con la presencia de Pedro Calvo, delegado de Seguridad y Movilidad del Ayuntamiento de Madrid, y de representantes del tejido empresarial vinculado al desarrollo tecnológico de infraestructuras de recarga y gestión energética, y ha expuesto aspectos claves que aún son incógnita en la implantación práctica del vehículo eléctrico en las ciudades, en especial en lo que atañe a cómo han de ser y dónde han de ubicarse los puntos de recarga, sobre lo que volveremos unos párrafos más adelante.
Impulso Institucional y Proyecto Industrial
En el ámbito de la Administración, Candil ha expuesto las actuaciones que hasta ahora ha realizado el Ejecutivo español tanto dentro de España como a escala internacional, en base a la presidencia Europea asumida en el primer semestre del año, para impulsar dicha industria y ha señalado que “a corto y medio plazo, los vehículos híbridos y eléctricos puros tienen un futuro claro para su desarrollo e industrialización, aunque no deben obviarse las mejoras que deben producirse en los motores térmicos tradicionales, pero es el VE la tecnología que sin duda, va a contribuir de una manera muy importante a varios aspectos estratégicos, como la lucha contra el cambio climático y la contaminación atmosférica, y a la reducción de nuestra dependencia energética”.
Candil, quien asumió su cargo en mayo de 2008, aludió a la oportunidad energética del VE y aseguró que el sistema eléctrico español está capacitado para dar servicio a de recarga a cinco millones de vehículos eléctricos sin necesidad de incrementar la potencia instalada, al tiempo que “el vehículo eléctrico permitirá disminuir el valle nocturno de la curva de carga del sistema eléctrico, aumentando, por tanto, el coeficiente de utilización de la potencia instalada y reduciendo el plazo de amortización de las inversiones”.
“Desde el punto de vista industrial parece claro que la crisis que sufrimos desde el 2008 provocará una reestructuración y reposicionamiento de la industria europea del automóvil y en dicho proceso, la innovación y el liderazgo tecnológico jugarán un papel clave. En este escenario, el vehículo eléctrico está llamado a ocupar una posición relavante”, añadió el directivo de Industria.
Candil incidió en el carácter estratégico del sector de la Automoción en nuestro país, que representa en su conjunto, el 6% de Producto Interior Bruto y del orden de 65.000 empleos de fabricantes y unos 200.000 empleos en la industria de componentes. Además, en torno al 20% de las exportaciones españolas corresponden a automóviles y sus equipos y componentes.
"Consecuentemente, desde un punto de vista industrial, España debería posicionarse entre los países que lideren la transición al vehículo eléctrico”, dijo el representante del Ejecutivo, que señaló los entornos urbanos y las flotas como el estadio natural para la implantación inicial de este tipo de vehículos.
Asimismo, señaló que en 2011, se dispondrá de unos 70 millones de euros para incentivos a la industrialización a través de las convocatorias de reindustrialización del Plan de Competitividad de Sectores Estratégicos para promover la fabricación en nuestro país de estos vehículos, y añadió que ya en las convocatorias de los Planes de Competitividad de 2009 y 2011, el Ejecutivo ha apoyado actuaciones relativas al VE con más de 100 millones de euros y en 2010, ha arbitrado una línea de avales por valor de 1.000 millones de euros, destinada a facilitar la financiación de inversiones productivas singulares, abordadas por las empresa de automoción instaladas en España.
Para el Gobierno español, la industrialización del vehículo eléctrico tiene un carácter singular y así lo reflejó en su intervención Candil, quien desgranó las ayudas que ya han sido aprobadas al respecto y que aseguró que tendrán continuidad a lo largo del 2011 con 500 millones de euros.
Los fabricantes
A la intervención de Candil siguieron las de los representantes de la industria automovilística, que si bien alabaron la actuación del Ministerio de Industria, “que ha trabajado bien y mucho por la industria del automóvil”, dijo el director general de Renault, Armando García Otero, lamentaron que el Ejecutivo no contemple incentivos directos a la compra de automóviles tras la finalización, en junio pasado, del Plan 2000 E, decisión que el representante ministerial defendió por estar en línea con las actuaciones planificadas también en el resto de países de la Unión Europea.
García Otero señaló que la compra de un coche es una compra emocional y por ello, depende del estado de ánimo de las personas. “En el año 2003, la población empleada en España era de 16,7 millones de personas y se vendían un millón y medio de coches. En el año 2010, la población empleada en España es de 18 millones y sin embargo, sólo se vende un millón de coches, un 33% menos”. Así, el directivo de Renault aludió a la necesidad de generar confianza en el mercado.
Respecto al vehículo eléctrico, García Otero rebatió los miedos que rondan a su implantación, como la dificultad de la recarga, la seguridad de estos vehículos o su elevado precio.
“La realidad es que el 80% de los ciudadanos europeos utilizan su vehículo menos de 60 km/día y nosotros ofrecemos autonomías de 160 km; un vehículo eléctrico incorpora los mismos estándares de seguridad activa y pasiva que hoy día tiene un vehículo convencional y en cuanto al valor, el VE deberá tener un coste global entre el valor de compra y la utilización, similar a un vehículo tradicional, teniendo en cuenta que el consumo de un VE y su mantenimiento distan mucho de los costes que implica un vehículo de motor de combustión interna”, dijo el directivo.
Por su parte, el director del Proyecto Emisiones Cero de Nissan, Javier Redondo, señaló que tras la implantación, en el primer trimestre del 2011, de los mercados de Portugal, Irlanda y Holanda, el de España será, junto con Francia e Inglaterra, un mercado en el que Nissan se incorporará con el vehículo eléctrico en “una segunda ola en verano del año próximo”.
Si bien alabó la actitud entusiasta que ha despertado el vehículo eléctrico en España, Redondo señaló la importancia de tener que avanzar en la homogeneización y sincronización de todas las iniciativas que surgen en torno a su desarrollo y advirtió de que “el cliente necesita un mensaje claro”.
El representante de Nissan señaló que “no queremos sufrir el síndrome del teléfono móvil” en alusión a una necesaria normalización en los estándares de recarga del VE y al respecto planteó que “en noviembre de 2011, es de esperar que todo lo relacionado con el vehículo eléctrico esté normalizado”.
Marcelino Iglesia, director del Proyecto E-Movilidad de Opel, planteó “un futuro de convivencia entre la tecnología eléctrica y los motores de combustión interna, de gasolina y sobre todo de gasoil, que seguirán estando presentes pero reduciendo su consumo hasta en un 30-40%, disminuyendo la potencia de los motores a través de turbocompresores y solapamiento de válvulas, mejorando la inyección electrónica, creando sistemas como el start/stop, que en pocos años estará implantado en el 80% de los vehículos, y todo ello con vistas a una transición hacia una electrificación progresiva de los vehículos que dará como resultado la implantación del hidrógeno”, dijo.
Asimismo, Iglesia abogó por los vehículos de autonomía extendida “como solución al síndrome de ansiedad de los conductores de un vehículo eléctrico”, y que es la tecnología por la que apuesta Opel, por ejemplo, en su modelo Ampera, pues cuando la energía de la batería llega al límite establecido, un motor-generador propulsado por gasolina proporciona de forma automática la electricidad necesaria para extender la autonomía a más de 500 km.
Ayudas, Ecología e Implantación Operativa
Ya en la segunda parte del foro, se hizo patente una de las incógnitas que rodean a la implantación del vehículo eléctrico en las ciudades, como es la instalación de los puntos de recarga y de cuál es el modelo más indicado a seguir y las posibilidades en torno a su desarrollo.
Para el delegado de Movilidad del Ayuntamiento de Madrid, Pedro Calvo, la cuestión es clara: “hay que repensar la ciudad y yo no veo una ciudad plagada de vehículos en las vías públicas conectados con sus respectivos cables a los puntos de conexión en la calle. Los coches no se han ganado el derecho natural a dormir en la vía pública”.
Y es que si bien pocos dudan ya de que el 95% de las recargas de VE se harán en aquellos lugares donde el vehículo duerma, esto es, los garajes en viviendas colectivas y unifamiliares o en el lugar de trabajo, en los parkings y en hoteles, hospitales y otros edificios terciarios como centros comerciales, etc., no hay que obviar la ingente cantidad de vehículos que duermen diariamente en la calle -en especial en las grandes urbes- y que por tanto, no disponen de una plaza de aparcamiento guarecida en la que poder recargar su batería aprovechando, por ejemplo, la tarifa valle.
Entonces, ¿cuál es el futuro de los puntos de recarga en vía pública al margen de su existencia para recarga de oportunidad ante una emergencia?
Al respecto, el director general de Drive Technologies de Siemens, Luis Pérez Piñeiro, señaló que existen opciones al punto de recarga tipo "tótem" y que su empresa está trabajando en el desarrollo de sistemas de recarga por inducción electromagnética, que permitirían que un vehículo pudiera recargar en la vía pública sin necesidad de cables.
Al margen de este debate, que surgió tras los turnos de intervención, Calvo hizo un análisis de la situación actual de implantación del VE en Madrid. “Nos encontramos en la fase cero en la implantación del VE y eso significa que la colaboración entre todas las administraciones y las empresas privadas es fundamental para que la apuesta del coche eléctrico sea acertada”, dijo.
El edil hizo un repaso a las actuaciones del partenariado público-privado por el que se ha apostado en la región con el proyecto Movele Madrid y planteó que ahora, también les ha llegado el turno a los usuarios, papel que Calvo entiende que en un primer momento, corresponde a las empresas propietarias y gestoras de flotas.
Pérez Piñeiro hizo en su turno de intervención un guiño a la necesidad de avanzar en el desarrollo tecnológico de elementos como las baterías. “Con la energía que tiene un litro de gasolina recorremos en nuestro coche entre 10 y 20 km, en función del tipo de coche y conducción. Con 9 kW/h (equivalente en coste a ese litro de gasolina) podemos recorrer con un VE hasta 60 km. La clave está en que un litro de gasolina pesa un kilo, mientras que obtener 9 kW/h precisa de 100 kg de baterías”, dijo.
El director del Programa Movilidad Verde de Iberdrola, Carlos Bergera, por su parte, abogó por una implantación del vehículo eléctrico ordenada y coherente, mirando al futuro pero sin plantearnos un escenario de millones de VE en las calles, que ahora mismo es irreal.
Al respecto, dijo que “quizás con un exceso de precipitación, dibujamos un escenario asociado al coche eléctrico lleno de redes inteligentes, de recarga rápida, de sistemas que no sólo toman la energía de la red, sino que también son capaces de entregarla y venderla, y esa perspectiva me parece negativa en estos momentos para lo que tenemos que hacer, que es comenzar la implantación progresiva de los VE”.
Asimismo, compartió el análisis de este mercado desde el punto de vista de su empresa y dijo que “las comercializadoras vemos el VE como un producto energético más, del que no tenemos que estar ausentes porque es una demanda que nuestros clientes nos van a reclamar. Por tanto, además del suministro de la energía y de servicios energéticos, tenemos que suministrar el servicio que va a demandar el uso de los vehículos eléctricos y en eso estamos ahora”, dijo.
Finalmente, intervino el presidente de Blue Mobility, Alberto Casal, quien planteó el escenario que a su juicio, se dibuja en la carrera tecnológica y de mercado del VE a nivel mundial, cuya implantación, por otro lado, es incuestionable “porque el modelo actual de vehículos con motores térmicos es insostenible”, lo que ha llevado a los fabricantes a apostar necesariamente por modelos con tecnología híbrida y eléctrica.
En su exposición, Casal dio a entender que mientras mercados como el Asiático, con el liderazgo de Japón, Corea y China, están apostando decidida y coordinadamente por el VE y lo mismo está haciendo Estados Unidos, en Europa no se está imprimiendo el mismo impulso ni con la misma coordinación, donde parece que cada país está luchando por aventajar en competitividad al resto de países europeos.
En definitiva, este foro ha evidenciado que nos encontramos en un mercado con muchas incertidumbres, pero en el momento adecuado para que su implantación se haga de forma coordinada, eficiente y positiva para trasladar al usuario final, que es el que verdaderamente va a marcar las pautas de futuro del vehículo eléctrico, los mensajes adecuados para su desarrollo.