Transportes Metropolitanos de Barcelona (TMB) ha incorporado en su flota este verano cuatro autobuses híbridos –motor eléctrico y motor de gasóleo combinados– de última generación, que se suman al prototipo de autobús diésel reconvertido en híbrido dentro del programa Retrofit, que se acordó el pasado marzo y ya lleva unos meses en pruebas de verificación. Se concreta así la apuesta decidida por la tracción eléctrica como una de las mejores opciones para un transporte público más limpio y silencioso en Barcelona y su área metropolitana.
Tres autobuses estándar y un midi acabados de adquirir
De los cuatro autobuses híbridos nuevos que se han presentado el 28 de septiembre, tres corresponden al modelo Tempus desarrollado por la empresa Castrosua, un prototipo del que estuvo a prueba en diversas líneas de TMB la primavera de 2009. Después de los ensayos y de las mejoras introducidas por el fabricante, se han adquirido tres unidades, dos de tamaño estándar (cerca de 12 metros) y uno midi(9,5 metros). Todos tres cuentan con dos motores eléctricos de 67 kW y un motor auxiliar diésel de 110 kW, además de un generador de 85 kW para producir electricidad [en] marcha y acumuladores por almacenarla. El coste de adquisición ha sido de 938.000 euros.
La cuarta unidad acabada de llegar es un autobús híbrido de la serie Lions City construido por la empresa alemana MAN, de 12 metros de longitud, valorado en 320.000 euros. Está propulsado por dos motores eléctricos de 75 kW cada uno, alimentados por acumuladores de alta capacidad (súper capacitadores) situados al techo del vehículo. Para suministrar energía eléctrica suplementaria durante el recorrido, el coche dispone de un motor diésel de 184 kW de potencia y de un generador de 145 kW. Un prototipo de este modelo estuvo en pruebas en Barcelona en octubre de 2009.
Consumo cero en las paradas y en los semáforos
Una característica común de los nuevos autobuses –considerados de preserie, o sea anticipo de lo que será la producción en serie futura– es que mientras están parados en semáforos y paradas no consumen nada de combustible ni hacen ningún ruido, y en cambio son capaces de recuperar energía durante la frenada.
Los cuatro autobuses híbridos han llegado a las instalaciones de TMB durante el verano y están ahora en fase final de adaptación de los parámetros que miden el comportamiento del vehículo en los diferentes perfiles de circulación para conseguir una idónea y eficiente explotación comercial. En octubre se irán incorporando a recorridos con pasajeros en líneas servidas con vehículos de características parecidos, con base a los centros operativos de negocio del Triangle y Horta.
Proyecto de reconversión de buses diesel a híbridos
La apuesta de TMB por la tecnología híbrida no solos comporta la adquisición de autobuses nuevos de esta naturaleza sino que se hibridarán vehículos diésel existentes. El primer paso en este sentido ha sido la construcción de un prototipo híbrido que está llevando a cabo un exhaustivo programa de ensayos para poder servir de referencia para la reforma en serie de una primera tanda de 40 vehículos.
El conjunto del proyecto de hibridación, llamado Retrofit, tiene como objetivo actualizar tecnológicamente y ambientalmente un centenar de unidades de la flota de autobuses de TMB, además de dinamizar el sector industrial catalán en una línea interesante de investigación, desarrollo e innovación. Se estima que los autobuses diésel reconvertidos en híbridos generarán beneficios directos en la salud de los ciudadanos, por la disminución de emisiones y ruidos. En términos económicos, se espera además que el ahorro de combustible permita amortizar la inversión necesaria, que por el que respeta al prototipo ha sido del orden de 1,4 millones de euros.
Para salir adelante este desafío tecnológico, TMB ha contado con la participación de Siemens, que suministra los equipos, y Edag, que aporta la ingeniería de diseño. ACC1Ó, agencia del Departamento de Innovación, Universidades y Empresa, ha impulsado este proyecto mediante su línea de ayudas orientada a la creación de Núcleos de Innovación Tecnológica, creada con el objetivo de fomentar el desarrollo de proyectos de investigación y desarrollo realizados en colaboración entre empresas, centros tecnológicos, de investigación y centros universitarios. También ha dado soporte la Unión Europea, por medio del trabase de los fondos Feder de desarrollo regional.
Después de la construcción del prototipo, próximamente comenzará la reconversión de 40 coches diésel, los de menos antigüedad, porque la inversión se amortiza durante toda la vida útil. Además, el sistema Siemens permite que en un futuro se pueda cambiar la fuente de energía, por ejemplo, por combustible.
Ahorro de hasta el 30% en consumo y contaminación
Con la tecnología híbrida se consigue reducir hasta un 30% el consumo de combustible y las emisiones de contaminantes, como por ejemplo el monóxido y el dióxido de carbono, los hidrocarburos, los óxidos de nitrógeno, las partículas sólidas y los óxidos de azufre, lo que representa un beneficio directo para la calidad del aire. En el caso de los óxidos de nitrógeno, la reducción esperable puede ser superior al equivalente en consumo, por el hecho de que el motor acostumbra a funcionar en régimen óptimo.
Otras ventajas de los vehículos híbridos son la disminución del ruido, tanto exterior como interior, ya que los motores eléctricos son mucho más silenciosos que los de explosión. Según los ensayos conocidos, la reducción de la potencia acústica puede llegar al 50%. Para los pasajeros, además, la tracción eléctrica supone una mejora del confort, por la mayor suavidad de marcha. Las aceleraciones son progresivas, el conductor actúa menos sobre el freno y no hay tirones porque no hay cambio de velocidades.
Proyecto de híbrido eléctrico-gas
Otra línea de trabajo en cuanto a investigación e innovación ambiental es el proyecto por hibridar autobuses de gas natural comprimido, con la incorporación de motores de tracción eléctricos, que se está desarrollando en el marco del convenio establecido entre TMB y Gas Natural Fenosa el pasado abril. En este caso se sumarían las ventajas de eficiencia, silencio y suavidad de la tracción eléctrica, por una parte, y los de los motores térmicos de gas, mucho menos contaminantes y ruidosos que los diésel.
Conviene recordar que los autobuses de gas ya son considerados vehículos ambientalmente mejorados y que TMB tiene actualmente 296 unidades, que prevé incrementar en 500 hacia el año 2015.
Minibús eléctrico en pruebas
En cuanto a la tracción eléctrica pura, no se descarta que sea utilizada en vehículos ligeros, aptos para los recorridos sinuosos y los centros históricos de los núcleos urbanos. En este sentido, TMB está apunto de probar durante un periodo corto un prototipo de minibús cedido por la firma carrocera Indcar, que circulará en principio sin pasaje para comprobar la adaptación a itinerarios del tipo de las líneas de Bus del Barrio.
Preocupación por la protección del entorno
La protección del medio es uno de los ejes vertebradores de las políticas estratégicas de TMB. Por la condición de empresa de transporte colectivo, su actividad es esencial para el fomento de la movilidad más sostenible, y una clara alternativa al transporte en vehículo privado, menos eficiente y con más impacto en el entorno. Pero TMB va más allá y se ha marcado el objetivo estratégico de reducir el impacto ambiental que provoca su actividad, como consumidor de energía y otros recursos naturales, por una parte, y como generador de residuos, por otra.
En este sentido, en cuanto a la flota de autobuses –integrada por 1.090 unidades–, se ha decidido que todas las adquisiciones en lo sucesivo sean de vehículos híbridos o de gas natural comprimido, las dos tecnologías más limpias que actualmente la industria puede ofrecer con garantías para el transporte público urbano de viajeros. Sólo se adquirirán, pues, vehículos ambientalmente mejorados.
Medidas para ambientalizar el 100% de la flota
En cuanto a la flota diésel actual (unos 800 coches, de los que 122 usan biodiesel 30), los más nuevos serán reconvertidos en híbridos dentro del proyecto Retrofit, los más antiguos serán sustituidos por coches de gas natural o híbridos y el resto se actualizarán ambientalmente mediante la colocación de filtros de partículas y de óxidos de nitrógeno. Toda la flota se adecuará a corto plazo a los requerimientos ambientales más exigentes.
Recientemente, además, TMB ha aprobado el Pla Director de Sostenibilidad Ambiental, como aglutinador sistemático de las líneas de trabajo en la investigación de la máxima eficiencia energética, la mitigación del impacto en el cambio climático de sus actividades, la mejora de la calidad del aire y la contribución al desarrollo de una cultura cada vez más sostenible, en el marco de la política de responsabilidad social de la compañía.