La Consejería de Salud de la Junta de Andalucía ha subvencionado la elaboración y divulgación de una ‘Guía de prevención de accidentes de tráfico para jóvenes sordos y con discapacidad auditiva', que ha sido desarrollada por la Fundación Andaluza Accesibilidad y Personas Sordas.
La elaboración y difusión de esta guía se desarrolla en el marco del Plan Integral de Atención a la Accidentabilidad 2007-2012 que, entre sus líneas de actuación, persigue la prevención de los accidentes a través de campañas informativas y consejos.
Esta guía, la primera que se edita en España con estas características cumple con uno de los principios rectores del Estatuto de Autonomía de Andalucía, el cual recoge "el uso y la protección de la lengua de signos española con el fin de alcanzar la igualdad de las personas sordas".
Esta guía se dirige a un colectivo específico, el de los jóvenes sordos y con discapacidad auditiva, un grupo de población que presenta un riesgo añadido, además de los propios de estas edades, ante los accidentes de tráfico, debido a la imposibilidad de acceder a los soportes informativos habituales de las campañas de prevención por la barrera de comunicación que constituye su sordera o discapacidad auditiva. Se estima que en Andalucía la población joven (15-34 años) que presenta este tipo de discapacidad es de alrededor de 7.000 personas.
Las recomendaciones recogidas en la guía se refieren tanto a pautas generales, comunes al resto de conductores jóvenes, tales como el uso del casco o el del cinturón de seguridad, como a específicas para los jóvenes con sordera que, por motivo de su discapacidad y ciertas pautas de conducta al volante, tendrían que tenerse en cuenta para la prevención de los accidentes de tráfico y la promoción de hábitos saludables para una movilidad segura y responsable.
La guía está disponible tanto en Internet, a través de la plataforma virtual de la Fundación, como en un CD que se ha difundido entre la población joven con sordera de Andalucía, asociaciones de personas sordas, centros de formación reglada y no reglada, y otros canales de comunicación usados normalmente por los jóvenes que poseen en mayor o menor grado esta discapacidad.
Además, se ha validado la calidad de la lengua de signos y el contenido de la guía así como otros elementos del material informativo. Junto a ello, se ha realizado un testeo y una evaluación sobre el grado de satisfacción final y de acceso del producto, que ha arrojado unos resultados positivos entre la muestra consultada.
El Plan de Accidentabilidad destina su inversión, que supera los 23,1 millones de euros, a incrementar los recursos asistenciales, a mejorar los circuitos de atención urgente y emergente, a reducir los tiempos de respuesta, entre otras cuestiones.