Endesa ha inaugurado la primera estación de servicio de gas natural comprimido (GNC) vehicular de Baleares que dará servicio a los 12 nuevos autobuses de la Empresa Municipal de Transportes de Palma. Estos vehículos han sustituido el combustible tradicional por una solución más limpia y respetuosa con el medio ambiente que viene a ratificar la apuesta de Endesa por soluciones de transporte más ecológicas, como son el vehículo eléctrico o a gas.
La gasinera es la primera instalación de estas características en Mallorca y coincide con el reciente hito de la llegada de este combustible a Baleares. El gas que se suministra es almacenado a 220 bares en fase gas en vehículos. El proyecto, que se desarrolla con los autobuses de la empresa Municipal de Transportes de Palma, es extensible a otro tipo de vehículos (como flotas de taxis, servicios de mensajería, de reparto,…) que vean el GNC como alternativa al gasoil, por sus características de ahorro, reducción de contaminación, menor ruido, etc.
El acto de inauguración ha sido presidido por el presidente del gobierno de las Islas Baleares, Francesc Antich; acompañado del delegado del gobierno, Ramón Socias; la alcaldesa de Palma, Aina Calvo, la consejera de Comercio, Industria y Energía, Francesca Vives; y el consejero de Medio Ambiente y Movilidad, Gabriel Vicens. Por parte de Endesa ha participado Javier Uriarte, director general de Endesa Energía; Feliciano Fuster, presidente del Consejo Asesor de Endesa en Baleares; y Andreu Rotger, director general de Endesa en Baleares.
Un combustible más limpio
El Gas Natural Vehicular (GNV) es un combustible automotor sustituto de la gasolina en motores de combustión interna de encendido por chispa y en forma parcial del diesel en aquellos motores de encendido por compresión. Debido a su combustión más eficiente, prolonga la vida del motor, disminuye la frecuencia del cambio de aceite, aumenta la vida útil de los lubricantes, bujías, filtros del aire y del aceite.
El Gas Natural Vehicular tiene una combustión muy limpia: no emite cenizas ni partículas sólidas a la atmósfera; genera una reducida emisión de óxidos de nitrógeno (NOx), monóxido de carbono (CO), dióxido de carbono (CO2) e hidrocarburos reactivos, y virtualmente no genera dióxido de azufre (SO2). De modo que contribuye en la lucha del efecto invernadero y de la lluvia ácida.
Otras ventajas a destacar del gas natural es el hecho de ser más ligero que el aire, y en caso de fuga, el gas se dispersa hacia la atmósfera rápidamente en lugar de acumularse formando concentraciones a bajo nivel. Además es un combustible que no es corrosivo, ni es tóxico. A su vez, disminuye el grado de emisiones sonoras i representa el menor contenido de carbono de todos los combustibles fósiles.