El equipo de investigadores de la Cátedra Applus+ en Seguridad del Automóvil de la UPC y de Applus+ IDIADA ha desarrollado una instalación de ensayo que permitirá validar y estandarizar las tecnologías de detección de peatones que incorporan los vehículos.
Esta instalación, única en Europa, permite simular las situaciones más peligrosas que se pueden dar, según estudios accidentológicos realizados previamente, especialmente con respecto a las intersecciones en las que intervienen vehículos y peatones. Esta herramienta, fundamental para mejorar la seguridad vial, llena el vacío actual existente en la reglamentación y estandarización de estas tecnologías.
En los últimos años se están realizando grandes esfuerzos para introducir nuevos sistemas de seguridad activa y pasiva en los automóviles, para reducir el número de accidentes de tráfico o mitigar las consecuencias de éstos.
Los sistemas avanzados de ayuda a la conducción (advanced driver assistance systems, ADAS), junto con otras medidas, están contribuyendo a reducir de manera paulatina el número de víctimas mortales en las carreteras.
Estos sistemas ofrecen apoyo al conductor, ya que informan y previenen de situaciones de peligro, incrementan el confort y detectan y evalúan el entorno, e incluso pueden estabilizar el vehículo y ayudar al conductor a realizar una maniobra sin perder el control. Algunos de ellos, basados en sensores, sirven para prevenir colisiones en las intersecciones, ya que avisan al conductor cuando el vehículo se acerca a una intersección peligrosa.
Entre las nuevas tecnologías, aún incipientes, que incorporan los vehículos se incluyen las de radar, que distinguen obstáculos en la vía; las que disciernen obstáculos mediante un haz de luz y las de cámara, que analizan la morfología del objeto para distinguir a un peatón. La investigación de la Cátedra Applus+ y Applus+ IDIADA no sólo se ha centrado en la metodología de ensayo para los sistemas de asistencia a la conducción, sino también en el diseño de las herramientas de ensayo: la instalación y el elemento impactador, que simula la forma y el movimiento del peatón.
El recubrimiento del impactador, es decir, el maniquí que simula al peatón, está concebido para absorber la mayor parte de la energía producida en el impacto, sin puntos rígidos que contacten con el vehículo de ensayo.
El peatón de la instalación, pues, es totalmente impactable, para minimizar los daños en el vehículo que se ensaya en caso de que haya contacto, y sus extremidades son articuladas, de manera tal que realizan un movimiento acompasado en su desplazamiento por la pista, similar al que realiza una persona cuando anda. Este movimiento se consigue mediante el acoplamiento de la transmisión mecánica del movimiento longitudinal con el movimiento rotatorio del mecanismo de las extremidades que se ha diseñado.
El sistema de control del desplazamiento del peatón está sincronizado con el movimiento y la trayectoria del vehículo en la pista. Esto permite simular las distintas posiciones en que puede estar el peatón en el momento del impacto del vehículo.
La plataforma de ensayo, que incorpora accionamientos y elementos mecánicos para su funcionamiento y está gobernada por un sistema de control compuesto por varios elementos, se encuentra ubicada en las instalaciones de Applus+ IDIADA, en el Albornar (Tarragona). Se convierte, así, en la primera instalación de este tipo que permite ensayar con impactadores peatones.
La tecnología aplicada a la instalación supone un primer paso en la posibilidad de simular cualquier ente con el que el vehículo puede encontrarse en la carretera, como por ejemplo un ciclista, un motorista o una persona con un cochecito de niño.
Datos de siniestralidad
Aunque, en España y en toda Europa, el número de víctimas mortales en accidentes de tráfico tiende a disminuir, de manera global, la media de peatones muertos por atropello en Europa es de 6.000 el año, aproximadamente.
En el ámbito estatal, durante el año 2007 murieron 589 personas atropelladas. En vía interurbana, del total de muertes en accidente de tráfico (3.821 personas), el 15 % fueron peatones. En vía urbana, el 40 % del total de muertos en accidente de tráfico (740 personas) fueron peatones.
En la ciudad de Barcelona, durante el año 2009 se han mantenido estos porcentajes, ya que de las 40 víctimas mortales en accidentes de tráfico, 16 eran peatones, cifra que representa un 40 % del total.