El Parlamento Europeo ha aprobado un reglamento que establece que todos los neumáticos fabricados a partir de julio de 2012 llevarán una etiqueta informativa sobre su consumo de combustible, la adherencia en superficie mojada y el ruido que producen. Este sistema de etiquetado será similar al que ya se utiliza con los electrodomésticos.
El nuevo etiquetado tiene como objetivo ofrecer una información más completa a los consumidores sobre la eficiencia de los neumáticos en el momento de la compra. Este sistema incluye categorías sobre el consumo de combustible, desde el mejor rendimiento (clase A, verde) hasta el peor (clase G, roja). Además, los proveedores tendrán que especificar en todos los materiales promocionales, incluidas las páginas web, los niveles de adherencia en superficie mojada y el ruido de rodadura.
Este reglamento se aplicará a los neumáticos en venta a partir de noviembre de ese mismo año que pertenezcan a las categorías C1, C2 y C3. Los neumáticos recauchutados, los neumáticos todoterreno profesionales y los neumáticos diseñados para vehículos de carreras están exentos de esta norma.
Todos los neumáticos incluidos en las categorías C1 y C2 fabricados desde julio de 2012 tendrán que llevar una pegatina o etiqueta cuando sean conducidos de la fábrica al punto de venta. Además, los minoristas estarán obligados a facilitar la etiqueta a los compradores durante la venta.
Con el objetivo de promover los neumáticos más silenciosos, el Parlamento ha conseguido rediseñar el mapa de ruido. El nivel de ruido de rodadura estará indicado con números en orden ascendente u 'olas' negras. Los neumáticos silenciosos (aquellos que producen menos de 68 decibelios) estarán etiquetados con una ola negra y dos blancas, junto con el nivel exacto de decibelios.
Las modalidades para promover la fabricación de neumáticos eficientes serán decididas por los Estados miembros. En principio, los países sólo podrán aplicar incentivos a los neumáticos clasificados al menos como 'clase C'.
Los neumáticos representan entre un 20% y un 30% del consumo total de combustible de los vehículos. El Plan de Acción para la Eficiencia Energética, diseñado para reducir el consumo de energía en un 20% para 2020, incluye el etiquetado de los neumáticos como un medio para alcanzar este fin.